La reciente declaración de ilegalidad de la huelga del Steus en la Universidad de Sonora emitida por las autoridades estatales y magistrados tiende a ocultar (y por lo tanto a no resolver) las verdaderas causas del conflicto en la unison.

      Esta declaración se presenta en un momento histórico en el que las instituciones gubernamentales atraviesan por una grave crisis de credibilidad en la medida de que aumenta considerablemente la distancia entre el discurso y la acción, es decir, entre lo que dicen y lo que realmente hacen.

Diversos pensadores contemporáneos nos advierten sobre el fin del mundo moderno, un mundo que se encuentra agotado en la medida de que este mundo tal y como lo conocemos tiende a desaparecer junto en el Estado como tal. Las instituciones base del sistema social tienden a derrumbarse frente a nuestros ojos al dejar de cumplir las funciones para las cuales fueron creadas.

Tan solo mencionemos unos nombres. Alain Touraine: El fin de las sociedades, Zygmunt Bauman: La sociedad sitiada, Manuel Castells: La era de la información, etc., son solo algunas aportaciones que nos ilustran sobre la grave crisis en la que nos encontramos en estos momentos históricos y que nos dan elementos que fundamentan la afirmación de que realmente no vivimos en un Estado de Derecho, sino que en realidad estamos siendo testigos del fin de la era moderna, que entramos en la postmodernidad que se caracteriza por la dictadura de la economía de libre mercado que penetra en nuestro gobiernos, corrompe a nuestras instituciones y se apodera de nuestras mentes para controlar nuestros comportamiento reduciéndonos a un comportamiento socialmente aceptable. El comportamiento del consumidor. Si no consumimos, somos marginados y pasamos a formar parte de la categoría de “consumidores defectuosos” tal como nos plantea Zygmunt Bauman.

      En realidad no necesitamos leer mucho para darnos cuenta de que vivimos en un mundo en el cual las instituciones dejan de funcionar y no cumplen con las tareas para las cuales fueron creadas. Pero en verdad la lectura de libros con información científica, sobre todo de las ciencias sociales, nos permiten comprender lo que está sucediendo.

      En la memoria colectiva se encuentran varios ejemplos de cómo la justicia en México no existe ya que se vende al mejor postor. Recordemos los casos de la Guardería ABC sin resolver, sin justicia para los familiares de los bebés fallecidos en ese lugar, una herida que sigue abierta y un ejemplo claro e irrefutable de que las autoridades que laboran en las instituciones que deberían respetar el Estado de derecho no han hecho nada al respecto.

      El Estado de Sonora es un ejemplo vivo de la impunidad, de las injusticias, recordemos el caso del exgobernador Guillermo Padrés, quien arrasó con las arcas estatales, favoreció a gente cercana a él, fue a la cárcel temporalmente, pero ya se encuentra libre de cargos. Alguien podría preguntar: ¿y la justicia?, Eduardo Galeano ya respondió a esa pregunta: “la justicia es como las serpientes, solo muerde a los pies descalzos”.

      Un caso muy cercano para los trabajadores que laboramos en la Universidad de Sonora y que toca nuestras fibras sensibles es el robo de más de 6,200 millones de pesos (¿alguien puede imaginar esa cantidad de dinero en efectivo? confieso que yo no) del Fondo de Pensiones y Jubilaciones del ISSSTESON, dirigido en aquel entonces por la presunta responsable del desfalco Teresa Lizárraga Figueroa quien goza de libertad gracias a su puesto de Diputada plurinominal del Pan. Los trabajadores universitarios afectados por este desfalco, que ahorramos durante décadas para poder retirarnos con un sueldo digno no podemos hacerlo porque nos dicen “no hay dinero”. Seguimos preguntándonos ¿dónde está la justicia en Sonora?

Entonces bajo la luz de los anteriores argumentos no es algo irresponsable afirmar que la justicia en México no existe, el llamado Estado de Derecho es en realidad un mito ya que los jueces utilizan las leyes solo para mantener una “paz social” caracterizada por una explotación laboral, una gran desigualdad social y para perjudicar a los trabajadores y a quienes protestan cuando criminalizan la protesta social, pero callan y guardan un silencio cómplice cuando los políticos y grandes funcionarios roban miles de millones de pesos del presupuesto público, incurren en actos de negligencia criminal o cometen verdaderas injusticias.

En este contexto llegamos a pensar que no es gratuito que los jueces de nuestro país sean uno de los grupos privilegiados a quienes la crisis económica no les afecta porque perciben sueldos estratosféricos.

      En el caso de la huelga del Steus de este 2,018 en los hechos la junta de Conciliación y Arbitraje renuncia a cumplir su función (conciliar entre las partes para llegar a acuerdos y evitar o solucionar los conflictos) y actúa en forma parcial al emitir un dictamen legaloide que intenta lesionar el derecho de huelga que tienen los trabajadores universitarios.

      Al actuar de esta forma se evidencia que la Gobernadora de Sonora incurre en una acción de desgobierno en la entidad bajo su responsabilidad, porque como bien es sabido los empleados gubernamentales no hacen nada sin contar con al aval de “la señora Gobernadora” y máxime tratándose de un asunto delicado como lo es una huelga en la máxima casa de estudios sonorense en períodos electorales.

      Llama la atención también que las autoridades universitarias hayan permitido que el conflicto llegue a este nivel cuando en realidad las causas que generaron el mismo bien pudieron haber sido resueltas si se hubiese mostrado disposición en la fase de negociación.

      La huelga es el último recurso que tienen los trabajadores para defender sus derechos laborales, contra la información distorsionada que se maneja, es importante mencionar que a nadie le gusta irse a la huelga, especialmente porque los trabajadores que se declaran en huelga dejan de recibir sus salarios por lo cual no tendrán efectivo mientras dure el conflicto, además de que existe el riesgo de no conseguir respuesta positiva a la totalidad del pliego petitorio y por si fuera poco, nada garantiza que reciban el 100% de salarios caídos.

      Existe además una percepción equivocada en el sentido de que los trabajadores universitarios perciben altos salarios. Hay buena parte de verdad en esta impresión social, pero quienes reciben altos sueldos, inclusive calificados de amorales son los trabajadores administrativos que laboran en la Universidad de Sonora, especialmente los funcionarios de alto nivel que se llevan una gran parte de la nómina de la Universidad sobre todo si tomamos en cuenta que en la Universidad de Sonora laboran más de 900 trabajadores de confianza.

En el caso de los trabajadores afiliados al Steus, sus sueldos son en realidad los más bajos dentro del tabulador de sueldos universitario. Sin embargo, las funciones que realizan estos trabajadores son realmente indispensables para garantizar el funcionamiento óptimo de la universidad y de ello he sido testigo durante toda mi carrera como trabajador académico.

Durante más de tres décadas he llegado a mi trabajo en la Universidad de Sonora a una hora promedio de las 8 de la mañana. Lo primero que veo al llegar es como se ha transformado un lugar que antes era un páramo desértico en un bello jardín donde se encuentran palmeras, plantas, césped, etc.

Veo los pasillos de los edificios limpios, recién barridos y trapeados, al igual que los pasillos interiores de los edificios, lo mismo puedo decir de los salones donde damos clases y el interior de los cubículos donde laboramos los profesores. Buena parte de los trabajadores del Steus entran a trabajar a las 6:00 de la mañana, para que cuando lleguen los estudiantes y profesores encontremos los lugares limpios y en condiciones adecuadas para realizar nuestra labor como educadores. Todo esto ha sido posible gracias a los trabajadores manuales agrupados dentro del Steus.

Existe una percepción equivocada acerca de los trabajadores del Steus cuando se les acusa en forma despectiva de ser unos trabajadores holgazanes. No dudo que existan trabajadores del Steus que no cumplan con sus funciones, como tampoco dudo de que hay maestros afiliados al Staus que no deberían ser maestros, e igualmente tampoco creo imposible que haya empleados de confianza en la Universidad de Sonora que perciben altos sueldos sin hacer realmente nada relevante o sustantivo para la Unison. Pero en base a casos aislados no pueden hacerse generalizaciones que afectan a la totalidad de integrantes de un grupo numeroso.

Aquí y ahora son estos mismos trabajadores del Steus que mantienen limpia a nuestra universidad los que el día de hoy se encuentran en huelga exigiendo demandas que no deberían ser motivos como para irse a la huelga en verdad.

Estos compañeros universitarios, enfrentan la agresión del Estado (que no es de Derecho les recuerdo) al dictaminar que su huelga es ilegal y en lugar de conciliar, en un hecho sin precedentes avientan la bolita a las autoridades universitarias afirmando que tienen la facultad para que ellos decidan si proceden a un despido colectivo de auténticos universitarios que han entregado su vida a la Universidad de Sonora, por negarse a satisfacer sus pliego de demandas.

¿Qué clase de conciliación es ésta? Si esto ocurriese en la iniciativa privada este funcionario público sería despedido de inmediato por negligencia e irrersponsabilidad.

Olvidan las autoridades estatales y universitarias que los trabajadores en huelga del Steus tienen un largo historial de democracia interna, combatividad, resistencia y unidad sindical que ya lo han demostrado en varias ocasiones. Tan solo recordemos la huelga del 2,014 que mantuvo paralizada a la Unison por 68 días.

http://www.monografias.com/trabajos101/testimonios-psicosociales-huelga-universitaria-basada-dignidad-steus-2-014/testimonios-psicosociales-huelga-universitaria-basada-dignidad-steus-2-014.shtml

Por lo que podemos inferir que no cederán a esta amenaza gubernamental. Eso en lo que se refiere a su dinámica interna, por otro lado si analizamos la dinámica externa, podemos ver que el Steus está rodeado de una gran solidaridad que proviene del Sindicato de Trabajadores Académicos (Staus), Sindicato de Telefonistas, la Cnte de Sonora, Los trabajadores del Ayuntamiento en movimiento de lucha por sus demandas, etc.

Es importante considerar que la huelga universitaria es motivada por demandas económicas que si existiese disposición para solucionar el conflicto, ya deberían ser resueltas. Pero recordemos también que la huelga se generó por la implementación de políticas económicas tales como la imposición de topes salariales, reducción del presupuesto a Educación y a Universidades públicas.

De las autoridades estatales y universitarias depende que esta lucha económica no trascienda y se convierta en verdadera lucha política. Debemos tener presente que es un año electoral y la existencia y prolongación de una huelga afecta los intereses de quienes están enquistados en el poder y pretenden proyectar una imagen de “paz y armonía social” para evitar que el electorado busque alternativas de cambio social. La razón está del lado del Steus que cuenta con una gran base de apoyo social, la intransigencia, el autoritarismo y la ilegalidad no lograrán levantar la huelga. La declaración de ilegalidad de su movimiento es un intento burdo de terminar con un movimiento que apenas inicia. El Steus, como lo ha hecho en otras ocasiones contando con el apoyo de otras organizaciones sindicales y sociales, levantará su movimiento de huelga sólo cuando el colectivo de trabajadores reunido en asamblea general considere satisfechas sus demandas.

Mientras esto suceda, cada día que pasa crece el apoyo social a su movimiento de huelga porque estamos frente a una pelea injusta, similar a la de David contra Goliat, un sindicato universitario contra el sistema social que utiliza todas sus instituciones y recursos para debilitar el movimiento. Pero el Steus no es un David cualquiera, es un sindicato con experiencia que ya ha demostrado anteriormente una gran disposición a la lucha en la consecución de sus demandas. Sigamos incrementando expresiones de solidaridad a la lucha del Steus. Con esto ayudaremos a que este conflicto termine lo antes posible.