La nueva ley número 169 orgánica de la Universidad de Sonora, publicada el 5 de marzo del presente año, sustituyó a la antidemocrática Ley 4 (después de 31 años y tres meses). Con este cambio desaparece la Junta Universitaria, mientras que el resto de los órganos de la Ley 4 desaparecerán al momento de instalarse los nuevos órganos colegiados.

Precisamente, se requiere que en cada departamento de la Universidad de Sonora se elijan a las y los representantes del personal académico y del alumnado ante los nuevos órganos colegiados, para poder instalarlos. Para el personal manual y administrativo, se requiere que elijan a sus representantes por cada campus.

Los órganos colegiados que se crean con la Ley 169 son: Colegios Departamentales, Colegios de Facultades Interdisciplinarias y Colegio Universitario.

En cada departamento se debe de elegir a un o una representante del personal académico por cada programa educativo del departamento, con su suplente, y lo mismo para el alumnado. El conjunto de representantes que se elija formará parte del Colegio Departamental.

Además, se debe de elegir a un o una representante del personal académico del departamento ante el Colegio de Facultad Interdisciplinaria correspondiente y otra u otro para el Colegio Universitario, cada uno/a con su suplente, y lo mismo para el alumnado. Estos/as representantes también formarán parte del Colegio Departamental.

Las elecciones se realizarán por medio del voto universal, secreto, personal y directo. La convocatoria para la primera elección de representantes con la Ley 169 deberá de publicarse a más tardar el 21 de marzo del presente año, y las votaciones deberán de realizarse antes del 18 de abril, ya que en esa fecha deben de quedar instalados los 39 Colegios Departamentales de la Universidad de Sonora.

El esfuerzo que se ha realizado para modificar la ley orgánica de la Universidad de Sonora, y con ello iniciar un proceso de democratización y transformación de nuestra institución, no rendirá frutos, si no se garantiza que compañeras y compañeros comprometidos con ese proceso lleguen como representantes a los nuevos órganos colegiados, evitando que éstos sean controlados por la administración universitaria, como ocurrió con la ley 4.

El llamado es a participar de manera intensa en este proceso de elección de representantes, impulsando y votando por verdaderos representantes de la comunidad universitaria y que se comprometan a impulsar un proyecto de transformación de la Universidad de Sonora, el cual puede incluir los siguientes puntos.

Propuestas para que se discutan y acuerden en los nuevos órganos colegiados (resultado del cambio de ley orgánica), incluyendo la aprobación de nueva normatividad: Estatuto general, Reglamento Escolar, Estatuto de Personal Académico, Reglamento de Cuotas, entre otros.

  • Gratuidad inmediata para estudiantes de escasos recursos. Condonación de adeudos y eliminación del cobro de cuotas por inscripción, colegiatura y cualquier otro concepto para estudiantes con dificultades económicas. Para ello se destinarán 20 millones de recursos propios.
  • Equidad de género. Impulso de programas que garanticen la equidad de género, incluyendo la paridad de género en los órganos de dirección.
  • Universidad libre de violencia de género y de cualquier tipo. Establecimiento de programas para erradicar la violencia de género y de cualquier tipo; promoción de una cultura libre de violencia.
  • Atención a la problemática estudiantil. Los nuevos órganos colegiados deben de poner énfasis en la atención y resolución de la problemática que presenten los estudiantes.
  • Eliminación de Examen EGEL. Eliminación del examen EGEL como requisito de egreso.
  • Ampliación de la matrícula de nuevo ingreso. Ampliación de la matrícula de nuevo ingreso al semestre 2023-2, para estudiantes de comunidades originarias, con discapacidades, de poblaciones marginadas y vulnerables. Además, volver a admitir estudiantes de nuevo ingreso en el primer semestre del año.
  • Fortalecimiento académico de los departamentos. Programas de apoyo a la docencia, investigación y vinculación, con fortalecimiento de las academias y los programas educativos.
  • Programa de mejoramiento docente. Impulso de un amplio programa de mejoramiento de la actividad docente, que comprenda lo disciplinar y lo didáctico, además de los apoyos correspondientes.
  • Apoyos a proyectos de investigación. Gestión de recursos para apoyo a proyectos de investigación con impacto regional, productivo o social, y simplificación administrativa en los trámites que se realizan para aprobación y gestión de proyectos de investigación.
  • Modelo Educativo. Promover una amplia discusión para definir un modelo educativo acorde a los avances que se han desarrollado en este tema, así como a la situación de la Universidad de Sonora.
  • Programa de ocupación de plazas académicas vacantes. Ocupación de más de 200 plazas académicas de tiempo completo vacantes, las cuales se requieren para fortalecer a los departamentos que no han podido ocupar sus plazas, para ello se requieren modificar los procedimientos de ingreso y los requisitos que se establecen en el EPA.
  • Programa de rescate de plazas académicas reconocidas por la SEP. La SEP le reconoce a la Universidad 1367 plazas académicas de tiempo completo y 61 de medio tiempo, de las cuales la Universidad reconoce menos de 1200 de tiempo completo y menos de 10 de medio tiempo. Se propone un programa para rescatar el total de plazas académicas reconocidas por la SEP.
  • Estabilidad laboral. Para el mejor desempeño docente se requiere, además de los programas de fortalecimiento docente, el brindar mejores condiciones de trabajo al personal de asignatura, para lo cual se requiere un mecanismo permanente de indeterminación, el cual permita obtener indeterminación a profesores de asignatura que cumplan con 3 años de antigüedad, además de otros requisitos, una vez que se defina que existe materia de trabajo disponible.
  • Promoción y becas de doctorado para Técnicos Académicos. Modificación de la normatividad para técnicos académicos, para que puedan promoverse de categoría y gozar de becas para estudios de doctorado sin las restricciones que se tienen actualmente, además de un mecanismo para estancias de investigación y académicas.
  • Respeto a la Comunidad Universitaria. Asegurar que las autoridades universitarias desempeñen sus labores con respeto a la comunidad universitaria, y cumpliendo en todo momento con la normatividad, en particular la norma Nom-035.
  • Reducción del salario y prestaciones de la alta burocracia universitaria. Revisión del tabulador de confianza y prestaciones para reducir los salarios y prestaciones de directores administrativos hasta la Rectora.
  • Recuperación salarial. Gestión de recursos para establecer un programa de recuperación salarial para el personal académico y administrativo.
  • Simplificación administrativa. Eliminación o simplificación de trámites en todas las áreas de la Universidad.
  • Reducción del aparato administrativo. Programa de reducción del aparato administrativo, no ocupando las plazas de confianza vacantes por pensión o cualquier otro motivo, reducción del personal de confianza temporal y cancelación de contratos de asesores.
  • Conversión de espacios administrativos en académicos. Uso con fines académicos de los espacios ocupados por la Junta Universitaria, las vicerrectorías, las divisiones y otras áreas administrativas.