Queriendo lavar su desaseo, el viernes 19 de mayo, las autoridades universitarias publicaron los acuerdos del acta 1 del Colegio Universitario.
En la mencionada publicación se puede leer que después de su instalación, el Colegio Universitario aprobó el orden del día propuesto. Claro, se omite decir que la Rectora y el Secretario General Administrativo incumplieron con el artículo 109 del Estatuto General de la Universidad de Sonora, al no incluir en la convocatoria de la sesión el orden del día, ni la propuesta de integración de los cinco colegiados permanentes.
Lo que sucedió en la primera sesión del Colegio Universitario ha sido catalogado como un madruguete de las autoridades universitarias, manchando con ello el proceso de democratización. Cabe aclarar que en la sesión hubo una gran resistencia por parte de consejeras/os estudiantes y académicos/as, quienes se opusieron a la clara imposición de las autoridades universitarias, eso no quedó registrado en el acta 1.
Informar a la comunidad universitaria mediante una publicación “aséptica”, donde se excluye todo lo que pueda mostrar la clara intención de las autoridades universitarias de controlar al máximo órgano de gobierno, tal y como lo hizo con el Colegio Académico de la ley 4, y la consecuente resistencia de consejeras/os comprometidos con la democratización y transformación de nuestra alma mater, es parte de la estrategia de las autoridades universitarias para que todo siga igual.
La gran diferencia es que ahora la comunidad universitaria está despertando del largo letargo de más de 31 años de autoritarismo y verticalidad de la ley 4. La democratización de la Universidad de Sonora se ha puesto en marcha y ni la Rectora, ni el grupo de los químicos, ni la alta burocracia universitaria podrán detenerla.
¡Democratización de la Universidad de Sonora ya!
Frente por la Democratización de la Universidad de Sonora